Por Juan Tomás Valenzuela
La despedida de Trump
de los Estados Unidos,
me recuerdan al ungido
y su antro de corrupción.
Este insípido bufón,
de manera descarada,
le había pedido a Cavada
y al secretario de Georgia,
que busquen bien en la alforja
a ver si no queda nada.
Les pidió tomar acciones
al ya saberse perdido,
de consultar al ungido
sobre amañar elecciones.
Que él buscaría los millones
que puedan ser necesarios,
sea dinero del erario
o los fondo de Helidosa,
pero que hagan cualquier cosa
con fines electorarios.
“Salgan a buscarme votos
por debajo de las piedras,
no importa si esto desmedra
al cívico más devoto”.
“Yo pongo a ganar la Loto
al primer republicano,
que me ponga entre las manos
los casi 12 mil votos,
para que ese maremoto
no se lleve a este cristiano”.
Durante más de una hora
Raffenserpergen y Trump,
le estaban dando betún
al Penco y su aplanadora.
Trump, contrató chapiadoras
para convencer votantes,
pero Raff se puso alante
y se negó a ese pedido,
negándole a este bandido
ese deseo tan frustrante.
Trump, intentó con Roberto
y con Castaños Guzmán,
pero es que ya, ningún plan
lo hará llegar vivo a puerto.
Lo mejor, es que a este muerto
le vayan haciendo el flú,
porque igual que este pechú
y los de torre Caney,
Trump, tiene su Watergate
y el de aquí, su Waterloo.
Juan de los Palotes
4 enero 2021